Desactivar Cargador

Procedimientos

Retinopexia pneumática


Este procedimiento, que se usa para reparar algunos desprendimientos de retina, se realiza en un centro quirúrgico ambulatorio y a veces en la clínica del médico. La técnica consiste en inyectar una pequeña cantidad de un gas especial expansible (C3F8 o SF6) dentro de la cavidad vítrea. La burbuja de gas flota en el ojo, y puede ser dirigida contra el desgarro responsable del desprendimiento, colocando y manteniendo por unos días la cabeza en ciertas posiciones. Esto previene que el líquido pase a través del defecto retiniano, dejando que el desprendimiento se resuelva. La burbuja también hace presión sobre el desgarro aplanándolo contra la pared del ojo y en esta etapa se aplica láser o crioterapia para producir un fuerte sello entre los tejidos.

Es importante mantener la posición de la cabeza (generalmente una semana a diez días) para asegurarse que la burbuja, al estar en contacto con el desgarro, lo mantenga cerrado. El gas se disuelve y desaparece espontáneamente después de varias semanas, al final de las cuales se espera que la retina permanezca permanentemente aplicada. Esta técnica tiene un éxito de un 80-85% y si fracasara no influye de manera alguna en una segunda intervención, por lo general un cerclaje o buckle escleral. A los pacientes que tengan una burbuja de gas dentro del ojo les está prohibido viajar por avión o subir grandes altitudes, ya que la disminución de la presión atmosférica hace que el gas se expanda, desarrollándose una severa elevación de la presión intraocular.